“Un viaje introspectivo al corazón de tu esencia”. Desde el centro Sabai Be Healthy definen así al Bahiku, una técnica que fusiona conocimientos de la medicina china, la fisioterapia, la acupuntura y el trabajo corporal acuático para tratar dolencias físicas y emocionales en el agua. Te invitamos a descubrir en qué consiste este reseteo físico, mental y emocional sutil y placentero.
“En la época moderna que vivimos, no estamos acostumbrados a que el contacto humano sea limpio, sin esperar nada a cambio. Ni nos escuchamos, ni nos regalamos momentos de bienestar. Tampoco disfrutamos de mucho tiempo de calidad. Bahiku es muy especial porque te da todo eso”, resume Irene Marañón, fisioterapeuta, instructora de watsu y fundadora de Bahiku Water Balance Experience, junto a Patricia Jessen. Marañón empezó a crear esta técnica ocho años atrás, como un compendio de todos los conocimientos que ha ido acumulando a lo largo de su carrera.
Ya en el año 2006, la creadora del Bahiku se empezó a interesar por las terapias acuáticas, convirtiéndose después en formadora de Watsu, técnica que combina el masaje japonés Shiatsu con los beneficios del agua. “Cada sesión es única e irrepetible. Escucho a tu cuerpo y trato de crear un espacio cómodo y seguro para él. Desde ahí, con la ayuda de la biomecánica y una técnica muy refinada, descubres nuevos lugares de relajación, bienestar y salud”, añade.
En qué consiste
Bahiku combina diferentes herramientas -medicina china, acupuntura, fisioterapia, trabajo corporal acuático- que se pueden llegar a manifestar de forma física o filosófica. “La vertiente más física se refiere a lo que puedo observar, tocar, mover, presionar, estirar, sostener y trabajar a través de la biomecánica. La vertiente más filosófica hace referencia a la forma de acoger y recibir a la persona”, aclara Marañón.
Lee el reportaje completo en nuestra edición de octubre-noviembre.
Por Anna León