Nunca nos hemos cuidado como ahora. También en lo que a estética se refiere. De hecho, la mitad de la población se realizó algún tratamiento facial o corporal en 2023. Sin embargo, la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), con motivo del lanzamiento de la campaña “Tu cara ya no me suena”, alertaba hace unos días sobre el intrusismo y la desinformación que amenazan el sector. Datos como que el 65% de los tratamientos médico-estéticos son realizados por profesionales no cualificados subrayan la importancia de escoger centros de confianza, así como de apostar por técnicas seguras y con resultados naturales, alejados de la temida huella estética.
En este sentido, la combinación de protocolos manuales y aparatología se convierte en una alternativa más que interesante para cuidar la piel que integra eficacia, naturalidad y seguridad. Centros como Cinc Estética (C/ Valencia 233, BCN) han convertido está cominación en su seña de identidad. Xènia García, su directora, destaca que el combo cosmética-manos-aparatología “permite disfrutar de un momento de bienestar y relax obteniendo resultados inmediatos, notables y 100% naturales, ya que ni se modifica la expresión ni los volúmenes”. “Y eso es lo que más piden y valoran quienes pasan por nuestro centro”, añade.
El poder de unas buenas manos
Las técnicas manuales y masajes que practican en Cinc Estética están cuidadosamente diseñadas para ir más allá de suponer un momento de calma y relajación. “Evidentemente, provocan un profundo relax y eso se refleja en las facciones. Pero con nuestros gestuales conseguimos activar la microcirculación y estimular el drenaje; por tanto, se logra un tejido más oxigenado”, explica Xènia. “Además, no hay que olvidar que el masaje es una gran herramienta para reafirmar y levantar los tejidos”, añade.
En Cinc Estética combinan estos protocolos manuales, repletos de beneficios y que prácticamente no cuentan con contraindicaciones, con cosmética de alta calidad, como la de la prestigiosa firma suiza Valmont o de la francesa Ella Baché. “Al unir las manos con una buena cosmética, con principios activos eficaces y concentrados, nutrimos e hidratamos la piel y le aportamos un plus de luminosidad”.
Aparatología, el mejor aliado
Para sacar el máximo partido a cualquier tratamiento, Xènia García lo tiene claro: el mejor aliado es la aparatología. En Cinc Estética trabajan con sistemas de vanguardia como LPG, la radiofrecuencia Indiba, el dispositivo de limpieza y exfoliación Aquapure, la terapia de luz LED de Medilux…
“La aparatología nos ayuda a llegar donde no alcanzan las manos. Ofrece resultados más rápidos y profundos a la hora de activar la síntesis de colágeno o regenerar tejidos”, destaca la experta. En definitiva, “ofrece resultados muy interesantes en cuanto a elevar rasgos, combatir la flacidez o atenuar arruguitas y manchas sin necesidad de cambiar los volúmenes ni la expresión. Es lo que más nos piden: mantener los propios rasgos, pero rejuvenecidos”.
Elegir un centro de referencia
Del mismo modo que sucede al buscar un tratamiento de medicina estética, cuando se opta por un facial no invasivo también es fundamental elegir un centro cualificado. Para ello, Xènia Garcia da algunas pistas. “Hay que tener en cuenta si ofrecen o no diagnóstico previo, la atención y explicaciones que dan sobre el tratamiento recomendado y, por supuesto, se puede comprobar la titulación de los profesionales. También puede orientarnos el tiempo que lleva abierto y las opiniones de los clientes”. Aunque uno de los aspectos más fiables es el tipo de aparatología y de cosmética con las que el centro trabaja. “Las marcas más conocidas y de mayor reputación exigen a los profesionales una titulación, formación constante…”, afirma. En el caso de Cinc Estética trabajan con firmas de prestigio como Valmont o Ella Baché y tratamientos de vanguardia como LPG, Indiba, Medilux o Mesofit.