En la avenida Catalunya de Cubelles (Garraf, Barcelona) se halla Belle & Spa, primer proyecto de Sara Manzana como emprendedora. Transcurridos 14 años desde su apertura, Belle & Spa es un “mundo de sorpresas”, que combina cabinas de estética con zona balneo para relajarse y estar guapa por dentro y por fuera.
Sara Manzana tenía solo 20 años cuando lo arriesgó todo y se decidió a emprender. Entonces, 14 años atrás, trabajaba en un centro médico-estético cuando tomó la decisión de abrir, el 1 de abril, su propio salón. “Me di cuenta de que, si era capaz de llevar hacia delante los salones de mi jefa, también podría lanzarme a la piscina con mi propio negocio”, recuerda. Un día, paseando por la zona junto a su madre vio este local y se enamoró de su situación. “Ahí empezó la locura, je, je, je. Cuando ves el salón desde fuera parece una cosa, pero una vez dentro te llevas una sorpresa. No te esperas lo grande que es y los espacios tan bonitos que tiene”, cuenta.
Único en su zona
Belle & Spa es el único centro en su zona que ofrece servicios de estética, medicina-estética y una zona de wellness privada. “Aquí puedes disfrutar de infinitos rituales, así como un baño en la piscina de agua caliente, jacuzzi, chorro de espalda y cascada”, describe Sara Manzana. El salón destaca por sus tratamientos faciales y corporales, aunque a su fundadora le encanta el diseño de cejas. “Se me da genial”, dice.
“En mi opinión, lo que hace único a Belle & Spa en el Garraf es su privacidad y lo a gusto que puedes estar. Es un lugar donde respiras mucha paz y llegas a desconectar. Tienes la impresión de que estás lejos de Barcelona”, añade.
Una de sus novedades es el ritual Sáhara, muy relacionado con el cambio. Belle & Spa ahora es un reflejo del crecimiento personal de Sara Manzana durante estos 14 años. “Meses atrás, Natura Bissé -cuenta la fundadora del salón- me regaló un viaje al Sáhara. Lejos de Cubelles volví a conectar conmigo misma y se me ocurrió crear mi propio ritual. Este consiste en una exfoliación corporal con arena del Sáhara y un masaje oriental con todo detalle de la cultura saharaui”.
“Belle & Spa me ha hecho madurar”
Una vez pasas la recepción, descubres que el salón se divide en cuatro áreas. A la derecha, se halla la zona de espera, confortable y espaciosa, además de las de manicura y pedicura. Unas escaleras llevan a la planta inferior donde se sitúan tres cabinas en las que se realizan faciales y corporales.
Por el contrario, a la izquierda de la recepción se localiza una cabina accesible para quienes no puedan bajar a la planta inferior. “Justo debajo se encuentra el diamante de nuestro salón: la zona de spa con piscina y cabina doble para proporcionar un tratamiento más íntimo, percibiendo la energía del agua”, describe.
En cuanto a la decoración, se desprende una estética minimalista, moderna y plagada de elementos a base de materiales nobles. Así se puede comprobar con los separadores de ambientes que aíslan la zona de espera de la de manicura y pedicura. Recientemente, han hecho una reforma con la que lo han cambiado todo -instalaciones, protocolos, etcétera- para ofrecer siempre la mejor experiencia. “Necesitaba un nuevo aire que me recordara la fuerza con la que empecé y me define. Para mí, Belle & Spa es como mi primer hijo. Aquel que me ha hecho madurar siendo tan joven. Es un proyecto hecho realidad con mucho esfuerzo e ilusión, aunque no ha sido un camino de rosas. Este proyecto ha hecho de mí la persona que soy ahora”, reconoce.
Por Anna León