En los últimos años, los spas han evolucionado significativamente y hoy en día ofrecen una amplia gama de servicios que rivalizan con los de los tradicionales centros de estética. Mientras que los spas solían enfocarse principalmente en la relajación y el bienestar, ahora combinan tratamientos estéticos avanzados, como la microdermoabrasión, peelings químicos y tratamientos faciales con aparatología, junto con su oferta de masajes y terapias de bienestar.
Según datos del sector de la belleza en España, la demanda de tratamientos faciales en spas ha crecido un 35% en los últimos cinco años. Además, muchos clientes valoran la experiencia integral que ofrecen los spas, combinando estética y bienestar en un entorno relajante.
Aunque los centros de estética siguen siendo líderes en técnicas avanzadas de belleza, los spas están ganando terreno como alternativas que integran la salud y la belleza. Este fenómeno está llevando a una redefinición del concepto de cuidado personal, donde el bienestar holístico y la belleza se funden en un solo espacio.